En 2023, dos años antes de lo previsto, alcanzamos nuestro objetivo de 2025 de reducir un 35 % las emisiones de gases de efecto invernadero de alcance 1 y 2. Este logro refleja la eficacia de las auditorías energéticas a nivel de sitio, las iniciativas centradas en la eficacia y la monitorización continua del rendimiento en todas nuestras operaciones.
En 2025, para continuar cumpliendo nuestro compromiso de reducción de emisiones, hemos establecido nuevos objetivos a corto y largo plazo, validados por Science Based Targets Initiative (SBTi). Nos comprometemos a alcanzar las cero emisiones netas de gases de efecto invernadero en toda nuestra cadena de valor para 2050. Como parte de este plan, nos comprometemos a lo siguiente:
- A corto plazo: reducir un 42 % las emisiones absolutas de gases de efecto invernadero de alcance 1 y 2 para 2030 utilizando como referencia el año 2024.* En el mismo plazo, reducir un 51,6 % las emisiones de gases de efecto invernadero de alcance 3 por dólar estadounidense de valor añadido, derivadas del uso de los productos vendidos. Para 2030, el 60,02 % de nuestros proveedores (según el gasto en bienes y servicios) tendrá objetivos basados en la ciencia.
- A largo plazo: reducir un 90 % las emisiones absolutas de gases de efecto invernadero de alcance 1 y 2 para 2050 utilizando como referencia el año 2024.* En el mismo plazo, reducir un 97 % las emisiones de gases de efecto invernadero de alcance 3 por dólar estadounidense de valor añadido, derivadas de la compra de bienes y servicios, la adquisición y el movimiento iniciales de materiales y el uso de los productos vendidos.
Estos objetivos ayudan a guiar la futura toma de decisiones y a garantizar que nuestro enfoque esté alineado con los nuevos estándares climáticos, las referencias del sector y las prioridades de las partes interesadas. Nuestra estrategia, alineada con SBTi, también respaldará el ahorro de costes a largo plazo, la resiliencia operativa y la preparación para los futuros requisitos normativos.
